Como algunos ya sabéis, hemos estado pasando tres semanas por Vietnam y la primera impresión es que con tres semanas te da tiempo a hacerte una idea de cómo es el país y de visitar los puntos más turísticos, pero poco más.
Vietnam no defrauda, es como en las imágenes que puedes buscar por internet o que vienen en las guías, pero mejor. Allá donde mires te vas a encontrar con una mujer con el típico sombrero vietnamita o Non La, puestos de comida callejera, motos, cables de la luz, otra vez motos… No importa que estés perdido en las montañas del norte, allí también vas a encontrar motos y cables de la luz sujetos por bambú; gorritos, no tanto. Pero esa es otra historia.
En Vietnam no hay que perder nunca la sonrisa. Todo se dice y se hace sonriendo. Da igual que pillen a alguien robando un trocito de tela en un mercado: le montan el pollo sonriendo. Quizás deberíamos aprender un poco de eso; es una buena manera de demostrar que aunque no nos pongamos de acuerdo en algo, no pasa nada. Tú sigues tu camino y yo el mio.
La comida. Otro temazo. Nosotros llevábamos potitos para Éire para pasar los primeros días, hasta hacernos una idea de cómo íbamos a subsistir. Y no nos equivocamos; al principio estás un poco perdido, pues todo el mundo te había dicho que lo ideal es comer en los puestos callejeros, pero cuando los ves piensas: ¡Ni de coña le doy eso a la criatura!.
¿Prejuicios? Puede. Pero las cosas hay que decirlas como son y la higiene en muchos casos brilla por su ausencia. Poco a poco vas reconociendo locales en los que comer no tiene por qué suponer un riesgo para tu salud ni para tu bolsillo y al final ya casi sabes decir los platos en vietnamita. Nosotros, sobre todo para las cenas, intentábamos buscar restaurantes que tuviesen en su carta crema de calabaza, que a Éire le encanta, pizza y macarrones (la gastronomía italiana llega a todas partes) o arroz con cerdo caramelizado. Le encantó. Lo más difícil de encontrar: pan. Como a Éire le entusiasma comer con pan a veces comprábamos en un puesto en la calle un par de bollitos y ya la teníamos contenta.
En cuanto al transporte, moverse por Vietnam es fácil. En las ciudades grandes optamos por coger taxis, que son bastante económicos y para movernos a nivel nacional, nosotros preferimos hacerlo en avión, pues por carretera los trayectos son muy largos. Nos pilló la Fiesta del Tet, la gran fiesta vietnamita, por lo que somos conscientes de que pagamos bastante más por los billetes de avión que en otras épocas del año. Pero como ya os contaremos en otro post, conocer Vietnam en estas fechas ha valido la pena. Nosotros somos muy cagones y aprensivos y solo alquilamos moto (con conductor) una vez para hacer un trayecto en la zona de Sapa. Creo que todavía tenemos el estómago un poco descolocado. Baches, riachuelos, piedras, decenas de motos, búfalos… Demasiado para nosotros (sobre todo para María). En realidad, solo demasiado para María, Éire se durmió en el trayecto.
En Vietnam gustan los niños y cuando ven que vas con uno, intentan facilitarte mucho las cosas en los hoteles y restaurantes. Y cuando vas por la calle, raro es que no te paren para preguntarte por la edad del crío o que no le hagan fotos. Suponemos que de la misma manera que a nosotros nos llaman la atención los niños de otras culturas con rasgos diferentes a los que estamos acostumbrados pues a ellos les pasa igual. Puedes verte en situaciones curiosas como estar sentado en una terraza y de repente encontrarte con un montón de cámaras de fotos que te apuntan o estar dando una vuelta por la playa y tener a una pandilla de niños haciéndole carantoñas a tu hija.
A los vietnamitas el sol no les gusta nada de nada. Eso de ponerse morenos no va con ellos así que evitan por todos los medios posibles que un rayo de sol roce su piel. A veces con un calor de verano madrileño, veías a un grupo con chaquetas de manga larga y gorros y telas tapándoles la cabeza y la cara. Te entraban sofocos solo de verlos.
Y hasta aquí nuestras primeras impresiones, que no os queremos aburrir. Que paséis un feliz fin de semana.
Ah, se nos olvidaba. Sí, está confirmado, comen perro.
Una gran experiencia sin duda. Con ganas de más entregas 🙂
Poquito a poco iremos contando. La experiencia ha sido una pasada. Gracias Lidia.
Bonita entrada para abrir boca (menos la última foto… ains). Me gustan esas impresiones generales. Ya iremos descubriendo más…
No podíamos no poner esa foto. Lo primero que nos pregunta la gente es precisamente si comen perro. Somos un poco morbosos. Poco a poco iremos contado más. Un abrazo.
Parece que Vietnam te dé una gran impresión. Me encantaría el artículo, gracias por compartirnos
Hola!
Acabo de descubrir vuestro blog buscando información sobre viajes a Vietnam con bebés. Mi hija tiene 18 meses ahora y tenemos pensado ir a mediados de enero 2017, aprovechando que vamos unos días a Singapur a ver a unos familiares.
Sólo vamos a disponer de 1 semana en Vietnam ¿qué lugares me recomendaríais visitar teniendo en cuenta la fecha y los pocos días que tenemos ?
Muchísimas gracias!
Hola Arancha. No sé cómo cae este año la Fiesta del Tet en Vietnam. Ten en cuenta que se colapsa todo y hay muchas cosas cerradas, menos aviones, trenes… En una semana si no os queréis meter mucho tute yo me decantaría por Hanoi, la Bahía de Halong y Hoian. La escapada a Sapa es muy bonita, pero no sé si os daría tiempo. O podéis hacerla en lugar de la Bahía de Halong. Ya nos contarás qué tal. Un abrazo enorme y gracias por escribirnos.
Hola! tenemos pensado ir a Vietnam este verano con nuestro hijo de 4 años. Tenemos en total 13 días enteros en el país y la intención es llegar a Ho chi min e ir subiendo hasta Hanoi (donde cogemos vuelo de regreso). Mi duda es cómo desplazarnos durante ese tiempo, ¿creéis que se puede alquilar un coche o cuál es la mejor opción? Otra cosa, con vuestra hija fuisteis en plan mochilero? ibais cambiando de muy a menudo de lugar? Muchas gracias por la info!!
Hola Aida. Qué gran aventura os espera.
Nosotros llevábamos mochila, pero los hoteles los llevábamos reservados desde aquí. Nos daba mucha pereza llegar a cada lugar, con la peque, cansados y dedicarnos a buscar hostales y hoteles. Salvo en Hoian, que estuvimos 3 noches, en el resto de sitios no estuvimos más de 2 noches.
Nosotros llegamos al aeropuerto de Ho Chi Minh desde España y la vuelta la hicimos desde Hanoi. En cuanto a los desplazamientos internos, nosotros los hicimos de varias maneras: en un tren nocturno fuimos a Sapa; un trayecto desde Hue hasta un aeopuerto los hicimos con un coche con chofer; de Ho Chi Minh a Can Tho lo hicimos en autobús y el resto de trayectos los hicimos en avión. Los vuelos son baratos. No alquilamos coche porque allí las carreteras no son buenas y el tráfico rodado es muy lento: los trayectos en bus entre las principales ciudades pueden durar 14 y 16 horas. Y con nuestra hija de 2 años nos parecía un peñazo.
Esperamos haberte ayudado un poquito. Si tienes más dudas, aquí estamos. Un abrazo enorme y disfrutad muchísimo del viaje.